Seguramente cuando seguimos la carrera de un director ya no es sólo por un género en especial, sino quizá por su estilo. Sobre todo si es tan marcado y personal que lo reconoces enseguida, y tienes ganas de volver a disfrutar de cada una de sus películas, y ver la siguiente. Pero estos directores pueden dar un giro, ysorprenderte con algo nuevo sin renunciar a su propia personalidad. Es lo que Edgar Wright ha conseguido con ‘Last Night in Soho’, pasando de sus comedias y narrativa rítmica visual, al terror psicológico, elegante y oscuro, de los thrillers británicos e italianos de los 60 y 70.
Last Night in Soho: giallo, thriller británico, e historia de fantasmas
«Eloise (Thomasin McKenzei) es una estudiante de moda en Londres que empieza a tener unos sueños muy vívidos que la transportan a la década de los 60 y a la vida de Sandie (Anya Taylor-Joy), una joven cantante que quiere lograr la fama. Las visiones pronto se convierten en pesadillas al desaparecer la línea que separa la realidad de la ficción, y al fundir las vidas de Eloise y Sandy.»

¿Te puedes llevar una sorpresa agradable con una película que ya sabía que te iba a gustar? Está claro que sí, y ‘Last Night in Soho’ es un claro ejemplo. Sabía que me iba a encontrar una gran película, bien rodada, con una banda sonora increíble, y unas geniales actuaciones. Pero incluso sabiendo todo esto, me maravilló y me sorprendió en todos los sentidos.
El director Edgar Wright (‘Scott Pilgrim Vs. The World’, ‘Baby Driver’) ya lleva tiempo jugueteando con el cine de terror y fantástico. Sólo hay que ver su magnífica ‘Trilogía del Cornetto’. Pero las tres siempre estaban acompañadas por gamberrismo, y no dejaban de ser comedias.

En ‘Last Night in Soho’ hace un cambio de registro, y nos trae un thriller de terror psicológico con toques sobrenaturales, y donde abandona casi cualquier atisbo de humor. Pero eso sí, permanece su estilo ágil, dinámico, y sin duda rítmico. Y lo de rítmico le va perfecto, porque tiene alma de musical.
No hay duda de su inspiración en los giallos de Mario Bava (‘La muchacha que sabía demasiado’, ‘Seis mujeres para el asesino’), y de Darío Argento (‘El pájaro de las plumas de cristal’, ‘Rojo oscuro’), sobre todo en parte de la estética, la fotografía —otro gran trabajo del director de fotografía Chung Chung-hoon (‘The Handmaiden‘, ‘Old Boy‘)—, puesta en escena, e incluso algún que otro plano. También hay momentos que me recordaron al cine de Brian De Palma (‘Impacto’, ‘Fascinación’).

Pero Edgar Wright no quería olvidar las películas que influyeron al giallo. Aquellas que venían del cine británico de Alfred Hitchcock, Michael Powell (‘El fotógrafo del pánico’), o Emeric Pressburger (‘Narciso negro’). Pero, sobre todo, como el propio director dijo, su verdadera inspiración vino de películas como ‘Amenaza en la sombra’ (Nicolas Roeg, 1973) y ‘Repulsión’ (Roman Polanski, 1965).
Una historia fascinante y trágica de la última noche en el Soho
El Soho de los 60 es una década que Edgar Wright le tenía fascinado. El misterio, lo que se perdió, y todo el tipo de arte que podías encontrar en cada persona, rincón y lugar. La película, a través de la propia Eloise, nos muestra esa nostalgia por una década en la que nunca viviste. Pero también veremos la parte más oscura y turbia de aquel lugar y década. Ese mundo maravilloso del Soho, y esa parte oscura de los bajos fondos criminales y la industria del sexo se mezclarán, y es lo que hará que Eloise abra los ojos hacia una realidad que no quería ver.

Edgar Wright investigó sobre las mujeres que trabajaron en el Soho durante aquella época, e incluso sobre actrices que trabajaron en la Hammer, donde algunas de ellas tuvieron finales trágicos. Una historia por la que han pasado (y siguen pasando) cientos de mujeres que buscaban su sueño con ilusión en el mundo del espectáculo, y encuentran una realidad muy diferente y dura. A esta realidad temible se le añadirá trama llena de suspense y terror sobrenatural.
En ‘Last Night in Soho’ nos sentiremos fascinados por ese encanto del Soho, como la propia Eloise, y sobre la vida y el destino de Sandie. Los saltos entre la década de los 60, donde Eloise es testigo principal de esa parte trágica y oscura por la que vivirá Sandie, y el Londres de la época actual, donde intentará averiguar qué le ocurrió, funciona a las mil maravillas.

Todo con un gran ritmo, y donde el suspense y el misterio irá en aumento, al igual que una atmósfera cada vez más inquietante, y donde no faltarán escenas muy perturbadoras. ‘Last Night in Soho’ tiene un gran suspense, pero reconozco que hay partes de la trama que ya he visto con anterioridad, y nos podamos oler alguna cosa. Aún así, es una película que vería y disfrutaría una y otra vez.

Ha recibido bastantes críticas negativas sobre su tramo final. La locura que se desencadena, y el cambio de registro (que no desentona con el resto de la película), para mí fue una gran guinda final. Este horror operístico era justo lo que esperaba hacer Edgar Wright, y a mí me encantó.
El diseño de producción, la iluminación de las calles del Soho con esas luces de neón (y sombras), y los juegos de espejos, hará que todos esos momentos geniales e inquietantes, se conviertan en una maravilla visual. Y a todo esto hay que sumarle la gran narrativa de Wright. En resumen, como he dicho antes, visualmente es elegante a la par que oscura. Esto fue una de tantas cosas con las que acabó atrapándome. Luego vendría bastante más.

Su increíble banda sonora me maravilló tanto, que no paro de escucharla en bucle. Está llena de temas británicos de los 60 como ‘Anyone Who Had A Heart’ y ‘You’re My World’ de Cilla Black, ‘Starstruck’ de The Kinks, ‘A World Without Love’, de Peter and Gordon, ‘Land of 1000 Dances’ de The Walker Brothers, y como no, ‘Downtown’ de Petula Clark. Y ojo a este tema cantado por Anya Taylor-Joy, increíble.

Todas y cada una de estas canciones están usadas de una manera maravillosa y genial, y adecuadas para cada momento. A destacar el baile entre Thomasin McKenzei, Anya Taylor-Joy, y Matt Smith, con el tema de ‘Wade In The Water’ de The Graham Bond Organisation. Ahí veremos la magia de Edgar Wright usando la música, el montaje, los movimientos de cámara, y un magnífico trabajo en la coreografía de los tres protagonistas. Una absoluta maravilla.
Last Night in Soho: The Players
Tranquilamente podría decirse que el Soho es uno de los personajes de esta película, pero por delante están las dos protagonistas, a quienes acompañaremos por este mágico viaje por el barrio londinense.

La mayor parte del peso lo lleva la actriz Thomasin McKenzei (‘Jojo Rabbit’, ‘Old’) que está genial como Eloise. Veremos como esta chica inocente de pueblo tendrá que enfrentarse a la dureza de un Londres que no es como se imaginaba. Pero además será testigo del destino de Sandie, el peso de no poder ayudarla, y lo que conlleva descubrir qué le ocurrió. A mitad de camino nos haremos dos preguntas: ¿Es una historia de fantasmas? ¿O más bien es una historia tan trágica, que dejó una huella psíquica muy intensa? Eloise se replanteará, al igual que nosotros, si lo que está viendo por su “don” realmente ocurrió, o todo es producto de su imaginación.

El glamour de los 60 nos lo muestra la maravillosa Anya Taylor-Joy (‘La Bruja’, ‘Múltiple’). Su presencia, carisma, una especie de aura enigmática que la rodea, la ha hecho perfecta para el papel de Sandie. Al igual que Eloise, aunque con una gran seguridad, ella va comenzar lo que cree que es su gran momento. Pronto se dará cuenta que detrás de las luces de neón y la música, hay un mundo muy oscuro en el que quedará atrapada. Además de su gran actuación, hay que decir que Anya canta de una manera increíble, y lo demuestra cantando los temas de ‘Downtown’ o ‘You’re My World‘. Esta actriz es una fuera de serie.
También un gran trabajo de Matt Smith (‘Doctor Who’) como Jack, el hombre que meterá a Sandie en el mundo del espectáculo, y también será su protector. Un hombre que la protegerá… pero sólo por una razón. Gran interpretación de este personaje lleno de carisma, atrayente, pero también peligroso.

Y todos acompañados de enormes actores y actrices de los 60. Margaret Nolan (‘James Bond contra Goldfinger’), Rita Tushingham (‘Doctor Zhivago’), la espléndida Diana Rigg (‘007 al servicio de su majestad’, y la señorita Peel en la serie de ‘Los Vengadores’), con un gran último papel y a la que Edgar le dedicó la película. Y también a Terence Stamp (‘Superman’, ‘Misterio en la Isla de los Monstruos’) con un personaje bastante enigmático que empezará a obsesionarse con Eloise.
En pocas palabras, todos ellos están brutales y con unos grandes personajes.
Conclusión
‘Last Night in Soho’ es una maravilla absoluta que mezcla el thriller británico, el terror sobrenatural, y el giallo italiano. Una rara avis en el filmografía de Edgar Wright que me ha sorprendido, y que entra directamente en mi Top del director británico junto a ‘Shaun of the Dead‘.
Thomasin y Anya están increíbles, y sus personajes son fascinantes. Algo que ocurre con ese Soho de los 60, que casi podría ser un personaje más, al igual que lo es su magnífica banda sonora. Ojo a su tramo final desatado, que, aunque muy criticado, a mí me ha encantado. Quizá algunas partes de su trama esconden pocas sorpresas, pero eso no quita grandes momentos de suspense, y algunos bastante perturbadores.
Cuando salí de verla en el Festival de Sitges 2021, sólo quería volver a entrar a la sala para verla de nuevo. Y cuando volví a verla en cines, lo mismo. Es una película que no me cansaré de ver, escuchar, y recomendar. Una gozada.
Ficha técnica
- Título original: Last Night in Soho
- Año: 2021
- Duración: 118 min.
- País: Reino Unido
- Director: Edgar Wright
- Guión: Edgar Wright, Krysty Wilson-Cairns
- Reparto: Thomasin McKenzei, Anya Taylor-Joy, Matt Smith, Terence Stamp, Diana Rigg, Rita Tushingham, Margaret Nolan, Synnove Karlsen, Joakim Skarli.
- Fotografía: Chung Chung-hoon.
- Música: Steven Price.