Hay que dar gracias cuando se juntan las casualidades, la suerte, y la curiosidad, porque entre las tres consiguen descubrirte no sólo un peliculón, si no también a enorme director. Esto me pasó cuando de casualidad vi el título de ‘The Pig, the Snake and the Pigeon’, de Wong Chig-po. No sabía de qué iba exactamente, el cartel tampoco ayudaba, y no conocía al director ni a sus protagonistas. Pero con los primeros minutos, me enganché a este increíble thriller de Taiwán.
‘The Pig, the Snake, and the Pigeon’, una fábula China
«Cuando descubre que solo es el tercer fugitivo más buscado de Taiwán, un ambicioso criminal decide eliminar del podio a los dos primeros.»
Al director Wong Ching-Po lo acabo de descubrir con esta película, y sin duda voy a tenerle muy en cuenta en el futuro. La sorpresa que me llevé con ‘The Pig, the Snake, and the Pigeon’ sólo puedo calificarla de increíble. Empieza con el entierro de un jefe criminal, y donde un joven aprovecha para asesinar a otro sin piedad, seguido de una increíble huida por las calles. Todo esto con un impresionante juego de cámaras, travellings, un montaje excepcional, además de buenas escenas de acción con peleas sucias y violentas.
Cuatro años después, el protagonista, escondido de la ley, recibe la noticia a través de una doctora a la que conoce, que tiene cáncer de pulmón y que le quedan meses de vida. Convencido por ella para entregarse como último acto de redención, descubre que es el tercero en la lista de los más buscados de su país. Su nuevo propósito: matar a los dos primeros de la lista para convertirse en el número uno.
Lo que comienza como un thriller de gángsters asiáticos con traje que tanto nos gusta, donde comienza desde ese cine de acción de Johnnie To (‘Breaking News‘, ‘Exiled‘), muy cercano a ‘Con los días contados’, hasta el melodrama de Wong Kar-wai, y después a otra cosa que ya no puedo desvelar.
Tiene un ritmo y narración magnífico. Desde una persecución de infarto, hasta momentos más pausados para ver por lo que pasan los personajes, y manteniendo la tensión de principio a fin. La acción está muy dosificada, hay escenas crudas y violentas, pero también es una película triste y con cierto toque de humor negro, y donde nos volará la cabeza en un tramo final que me dejó temblando en todos los sentidos. Todos estos momentos impactantes están acompañados de unas imágenes increíbles y una fotografía excepcional.
El título de ‘The Pig, the Snake, and the Pigeon’ hace referencia a la leyenda china: La Matanza de los Tres Males (o Bestias) por parte de Zhou Chou. No puedo explicar mucho de esta fábula por no daros muchas pistas, pero tal como está adaptada a esta historia, me ha parecido perfecta.
Los personajes son una maravilla, llenos de matices, algunos odiosos y otros a los estaremos deseando que les salven. Todos nos darán muchas sorpresas, y con muy buenas interpretaciones. El actor Ethan Juan (‘The Assassin’, ‘Detective Dee’) tiene mucho carisma y con una infinidad de registros, dándonos una interpretación brutal.
El resto del reparto se compone por Ben Yuen, que nos da uno de los momentos de más tensión de la película, y Yi-Wen Chen, están geniales. También destacar a la actriz Gingle Wang (‘Detention’), que está maravillosa.
Conclusión
Me ha costado escribir esta reseña, para evitar explicar mucho de la película, pero os digo desde ya, que ‘The Pig, the Snake and the Pigeon’ es una obra maestra del cine asiático. Tiene acción, suspense, drama, una historia que te golpea fuerte, con unas escenas, fotografía y planos increíbles.
También os recomiendo anteriores películas del director Wong Ching-Po: ‘Once Upon a Time in Shangai’ y ‘Revenge: A Love Story’, que son una absoluta maravilla. Esperemos que no tarde casi 10 años en traernos otra película.
Esta película a fecha de hoy la tenéis en Netflix con el nombre de ‘El cerdo, la serpiente y la paloma’.
Ficha Técnica
- Título original: Zhou chu chu san hai
- Año: 2023
- Duración: 134 min.
- País: Taiwán
- Director: Wong Ching-Po
- Guión: Wong Ching-Po
- Reparto: Ethan Juan, Ben Yuen, Gingle Wang, Chen Yi-Wen
- Fotografía: Jimmy Wong
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